Hay una serie de alimentos tóxicos para un perro que pueden comprometer seriamente su salud. Como propietarios responsables es nuestro deber conocer estos alimentos y evitarlos a toda costa:
- El chocolate
- La cebolla y el ajo
- El alcohol
- Los huesos
- El azúcar, las chucherías y los chicles
- Cítricos y otras frutas con hueso
- Leche
El chocolate
Tal vez el más conocido de todos los alimentos tóxicos para un perro sea el chocolate. Este dulce tan valorado entre los humanos contiene teobromina, que puede ser increíblemente tóxica para nuestro perro, especialmente para los de pequeño tamaño.
La cebolla y el ajo
La cebolla y el ajo suelen estar presentes en la mayoría de nuestros guisos, por lo cual muchos veterinarios aconsejan no dar las sobras a nuestras mascotas. Estos alimentos, muy similares entre sí, son peligrosos ya que pueden acarrear anemia y otros problemas respiratorios.
El alcohol
El alcohol es una droga nociva incluso para los seres humanos. Sus efectos en los órganos de nuestros compañeros peludos pueden acarrear consecuencias fatales, por lo que dar alcohol a nuestros perros es una irresponsabilidad.
Los huesos
A pesar de la imagen que todos tenemos en nuestras mentes de un perro mascando un hueso, estos resultan muy perjudiciales. Existen grandes riesgos de asfixia, indigestión y perforaciones, especialmente con los huesos de aves que se astillan como agujas.
Si te apetece premiar a tu perro con un hueso acude a tu tienda de mascotas habitual y pregunta sobre preparados alimenticios con esa forma, existe una gran variedad y están diseñados para ellos.
Azúcar, chucherías y chicles
Debemos evitar que nuestro perro ingiera azúcar, especialmente cuando está presente en golosinas industriales. Darle azúcar a un perro es un error que puede acarrear serios problemas como la diabetes o la ceguera. En caso de ingesta de chicle los riesgos son aún mayores por el contenido de xilitol.
Cítricos y otras frutas con hueso
Los cítricos en general son perjudiciales para los perros, y las naranjas y limones lo son especialmente por su contenido de psoraleno. De hecho, los perros suelen evitar acercarse a estos frutos por su acidez. Respecto a las frutas con hueso, debemos tener especial cuidado con los melocotones y albaricoques, ya que además del riesgo de asfixia, los huesos de estas frutas contienen cianuro.
Leche
Sólo el ser humano tiene la capacidad de consumir lactosa pasada la edad adulta. La enzima que nos permite tomar leche no está presente en los perros, motivo por el que que debemos evitar darle productos lácteos a nuestras mascotas.
La lista podría ser interminable, por lo que lo mejor que podemos hacer como propietarios responsables es consultar a nuestro veterinario sobre el pienso más adecuado para nuestra mascota. Hay que darle sólo aquellos alimentos que hayan sido especialmente diseñados para ellos.